¿Por qué, en Tenerife, tenemos todos que pagar los juguetes de la cúpula de La Coordinadora?

La pregunta parece un sin sentido, pero no lo es y es que la cosa tiene mucha miga si lo miramos de manera pausada y reflexiva.

La cuestión es que desde la crisis de mediados del 2000 vivimos una situación complicada  en la sociedad de estiba SESTIFE-SAGEP.

Ya sea por la crisis, ya sea por los errores (cuando no horrores) cometidos en la gestión del futuro de los estibadores y de la estiba del estado español, la cuestión es que nuestro puerto anda renqueante en lo que a escalas, tráficos, trasbordos y tránsitos se refiere y por tanto en el número de turnos que realizan los trabajadores, situación que repercute de forma directa en el día a día de muchos compañeros del tajo. Bien es cierto que en estos últimos años asistimos a un repunte de los mismos, lo que podríamos entender como una recuperación de los tráficos además del aporte de los nuevos modelos de negocio que arriban a nuestro puertos, hablamos concretamente del tráfico de cruceros, pero lo cierto es que la situación no deja de ser acuciante y preocupante para la totalidad de los trabajadores de la estiba.

Esta situación de carestía, como no podía ser de otra forma, tenía que ser afrontada por el gestor de SESTIFE-SAGEP de alguna manera, qué duda cabe y tirando de manual la cosa no podía ser más sencilla; tocaba recortar y hacerlo de forma inmediata.

Puestos a ello, el consejo de administración de la SAGEP con su gerente al frente, hacen balance y presentan al comité de empresa, con mayoría de La Coordinadora, un paquete de medidas para paliar la situación de SESTIFE, paquete en el cual estábamos reflejado los trabajadores, como no podía ser de otra manera, exigiéndonos una importante aportación vía reducción de pagas y pluses, además de la consiguiente congelación salarial; lo dicho no había más tirar de manual.

Por su parte el Comité tenía que presentar ante los trabajadores la propuesta de recortes hecha por la empresa y hacerles entender la necesidad de la misma y con el fin de evitar un supuesto ERE con multitud de despidos aduciendo que no quedaba otra opción y a ello que se ponen. Se convoca asamblea, pero solo del mayoritario... interrupciones las justas, y se expone la situación además de la inminencia de la catástrofe que se nos venía encima si no aceptábamos los recortes. Al final la propuesta es aceptada y con ello puesta en marcha por la vía del KO, hombre bien mirado, si te dan a elegir entre “susto” o “trato” que menos que elegir “trato” para tener al menos una oportunidad.

La cuestión es que en su día, nuestra formación sindical, alcanza un par de “sillas” en el comité de empresa a la par que 2 delegados y con ello comenzamos a trabajar en algunos temas de especial interés uno de los cuales era verificar la situación económica de la empresa y con ello ratificar, o no, el programa de recortes que ésta habían implantado en la plantilla con la colaboración expresa de la parte del comité que representa a La Coordinadora, su presidente incluido.

Con todo ello después de mucho trabajar y sortear multitud de obstáculos, trampas y engaños, llega a nuestras manos las cuentas de SESTIFE-SAGEP, completas con todas sus páginas. Sin perder un minuto nos ponemos a su estudio pormenorizado, aunque bien mirado bastaba un simpe vistazo para comprobar que “el lobo” no era tan fiero como lo presentaban y ahora explicamos el por qué.

Para ello hagamos una pequeña recapitulación y presentemos en escena un importante actor de esta historia y que no es otro que la fundación de estudios portuarios FUNESPOR.

FUNESPOR es un órgano apéndice del sindicato mayoritario de la estiba como bien podemos leer en su memoria, de esto no hay la menor duda:

Constituida en el año 2000, la Fundación de Estudios Portuario FUNESPOR, es una organización privada sin ánimo de lucro, creada por iniciativa de Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar como un centro de formación e investigación en el ámbito de la actividad portuaria y el transporte marítimo.

Funespor se rige por un Patronato como máximo órgano de gobierno, compuesto por seis patronos elegidos por la entidad fundadora, uno de ellos en calidad de Presidente y los cinco restantes en representación de la Zona Norte, Zona Catalana‐Balear, Zona Levante, Zona Andalucía (Ceuta y Melilla) y Zona Canaria.

Su patronato está formado por dirigentes del mayoritario y a la cabeza de ellos el coordinador general Antolín Goya. En lo ue respecta a la dirección, el patronato se hace con los servicios del abogado Víctor Diaz Dominguez (vaya casualidad):

                En la actualidad los miembros del Patronato con:

·         Presidente: D. Antolín Goya González

·         Patrono: D. Miguel Rodríguez García

·         Patrono: D. José Francisco Alamar Bolea

·         Patrono: D. Manuel Cabello Sánchez

·         Patrono: D. Asier Abad Coarasa

·         Patrono: D. Emilio Manzano Lorenzo

El Director de Funespor, seleccionado por el Patronato para la gestión y coordinación de la actividad de la fundación, es D. Víctor M. Díaz Domínguez.

El trabajo que realiza está fundación está claramente dirigido por y para el beneficio del sindicato mayoritario, no hay más que seguir leyendo su memoria para entender que es así.

Pues bien, habiendo quedado clara la vinculación directa entre FUNESPOR y La Coordinadora siendo la primera apéndice de la segunda, lo que no llegamos a entender de ninguna manera es como esta fundación que nada tiene que ver con SESTIFE-SAGEP, recibe de esta, (una empresa en ERTE que ha exigido un recorte brutal en sus pluses y pagas a los trabajadores de la misma y que se supone con las cuentas en deficit) como es que recibe de esta, repetimos, la cantidad de 65.800 euros/anuales, en calidad de vaya usted a saber qué.

Hemos preguntado por activa y por pasiva a través de infinidad de escritos a la empresa cual es la finalidad de este pago y por qué se realiza estando como estamos, pero hasta el día de hoy no hemos obtenido respuesta alguna salvo la cantinela aquella que dice, la empresa está “mu mal”, no llegamos, esto no arranca, los recortes deben continuar, etc, etc, etc.

Y eso sin meternos en el tema de las dietas del consejo de administración, que para ser nosotros los caros, no sé yo si nos conviene tener a un consejo que cobra lo que cobra por reunirse 4 ó 5 veces al año, en una sociedad que se presupone deficitaria, con la plantilla en ERTE, plantilla que no hace más sufrir los rigores de los recortes en sus carnes; pero resulta que los estibadores somos los caros, pues para ser nosotros los que nos jugamos el tipo y los que, incluso, nos matamos creo que los hay mejor pagados por hacer mucho menos (humilde opinión de quién escribe) y eso sin contar el sueldo, que cobran, claro está.

Llegados a este punto la cosa no puede estar más clara. La situación de la empresa es deficitaria según para qué y para quién/es, que si SESTIFE-SAGEP tiene que pagar “los juguetes” de La Coordinadora entonces estará bien visto ese gasto, gasto que ya nos encargaremos de pagar todos los estibadores de la plantilla vía recortes como ya hemos explicado.

Como bien dijo Molière: “La hipocresía es el colmo de todas las maldades”, máxime cuando es a nuestras familias a las que realmente se les detrae del salario un tributo que solo busca saciar la ambición desmesurada de personajes que han arribado a la estiba con la única intención de sacar un beneficio propio sea este económico, social o político.

“Ignorar las consecuencias de los propios actos, eso es el infierno”

Alejandro Dolina

SALUD.